“Gracias a nuestra planta Kiverco, que apenas acaba de celebrar su primer aniversario, hemos salido adelante durante toda la cuarentena. La planta ha sido la espina dorsal que nos ha sostenido para atravesar estos tiempos críticos y hemos confiado en ella para continuar prestando un servicio a nuestros clientes clave, que es esencial”, dijo el Sr. Patterson.
Explicó que la confianza en esta planta de construcción y demolición establecida en Newcastle (la primera para la empresa en el Reino Unido) había mostrado su voluntad no solo de ofrecer un diseño altamente automatizado para soluciones de reciclaje, sino también una construcción robusta y una fiabilidad infalible.
“Uno de los factores clave para que nos centráramos en usar principalmente la planta Kiverco durante la cuarentena fue su diseño altamente automatizado. No había una gran estación de recogida y, como de todos modos se necesitan pocos recogedores, era fácil adaptarla al distanciamiento social”.
Y añadió: “No había esperado que nada tan inaudito pasara este primer año de nuestra panta y la planta ha tenido que trabajar mucho, pero ha cumplido su cometido. Sin duda pasan grandes cargas por este sistema, que realmente ha sido puesto a prueba. Nos ha permitido seguir adelante y además garantizando que podemos mantener nuestros niveles de servicio”.
Mirando en retrospectiva el año transcurrido desde la inauguración de la nueva planta, el Sr. Patterson hizo una reflexión: “Nos ha sorprendido necesitar tan poco contacto con Kiverco. En realidad no teníamos que ponernos en contacto con ellos para nada, cosa bastante poco habitual cuando se trata de una nueva planta, y eso ha sido una experiencia nueva para mí. Normalmente al principio suele haber más problemas”.
Cuando Remondis hizo la adquisición de la empresa de gestión de residuos de Newcastle JBT, las instalaciones tenían una capacidad limitada, dependían de la mano de obra manual y no eran eficientes.
Las instrucciones eran: doblar la capacidad de procesamiento mejorando drásticamente la calidad y la cantidad de materiales recuperados usando el mínimo de mano de obra para reducir los costes operativos y haciendo sostenibles los niveles de calidad.
Kiverco entregó una planta altamente automatizada en la cual la calidad del trabajo manual requiere menos mano de obra, es más segura y se lleva a cabo en un entorno más saludable.
Actualmente Remondis es capaz de procesar el doble que antes y alcanzar unos grados de pureza de más del 95 por ciento, con apenas seis recogedores.
Eso ha permitido a Remondis ampliar su base de clientes con potencial para doblar el rendimiento y proporcionar servicios de alta calidad a las autoridades locales. La fracción de residuos remanentes se ha reducido más del 10 por ciento y la producción reciclada se envía a usuarios finales de nivel superior.
La solución de reciclaje Kiverco ha integrado toda una variedad de sistemas de separación, incluyendo tamices, imanes, separadores por densidad y tecnología de clasificación por casi infrarrojos y ha sido construida para procesar un mínimo de 45 toneladas por hora.
Paul Carolan, director general de Kiverco dijo: “Ha sido un placer que nos hayan elegido para diseñar y entregar esta solución de reciclaje de bandera para Remondis, la empresa líder en gestión de residuos, y nos complace enormemente que haya tenido un desempeño tan bueno para la empresa durante esta época tan difícil para nuestro sector y para todo el mundo.”
“Creo que este primer año de Kiverco / Remondis y los comentarios de Steve demuestran que en Kiverco decimos lo que pensamos y hacemos lo que decimos: lo diseñamos bien, lo construimos bien y haremos siempre lo correcto”.
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